¿Cómo puede la mecanografía ayudar a niños con dislexia?

Para muchos de los que luchan con la dislexia, el mundo es un lugar increíblemente complicado. Los sistemas que operan en la mayor parte de la sociedad moderna hacen cada obstáculo aún más complicado. Desde el mismo comienzo de nuestras vidas todos nos tenemos que enfrentar a exámenes, entrevistas y documentos. Éstos pueden ser un desafío para la mayoría, pero lo son más aún en el caso de los diagnosticados de dislexia.

Muchas áreas de la vida pueden verse gravemente afectadas por la forma en la que un individuo procesa la información.

Muchos han encontrado en la mecanografía una herramienta útil que puede ayudar a los disléxicos a dominar los desafíos asociados a su trastorno. Para entender este hecho, debemos antes comprender lo que es la dislexia.

¿Qué es la dislexia?

Quizás lo más importante a tener en cuenta cuando hablamos de la dislexia es que no se trata de un síntoma de pereza, baja inteligencia, problemas visuales o cualquier cosa semejante. Es un trastorno muy común que altera la forma en la que el cerebro procesa el lenguaje, tanto hablado como escrito. Uno de los principales factores del trastorno es la dificultad lectora, que lleva en ocasiones que se refieran a él como “discapacidad de la lectura” o “trastorno de la lectura”, pero también tiene un impacto en el dominio del deletreo, la escritura e incluso el habla.

Es un hecho significativo que las personas con dislexia son totalmente capaces de comprender ideas complejas, y su potencial no debería quedar limitado debido a una mala comprensión de sus capacidades. A veces una persona sólo necesita un poco más de tiempo para procesar la información, o una forma diferente de procesarla (por ejemplo escuchar un audio-libro en lugar de leer).

Si su hijo ha sido diagnosticado de dislexia, no se trata de algo que se le pasará con el tiempo. La dislexia es un trastorno crónico. Sin embargo, esto no significa que carezcan de potencial para alcanzar la felicidad y el éxito. Existe una amplia gama de herramientas y estrategias de enseñanza que se pueden usar para ayudar a su hijo. De hecho, hay muchos adultos con dislexia que disfrutan de exitosas trayectorias profesionales en la ciencia, los negocios y las artes; algunos de ellos incluso disfrutan de fama y fortuna. Piense en personas como Steven Spielberg, Richard Branson, Whoopi Goldberg, Tim Tebow y Charles Schwab. Incluso la popular serie de libros infantiles ‘El capitán calzoncillos’ fue escrita por un escritor disléxico, Dav Pilkey.

SÍNTOMAS DE DISLEXIA

Si no está seguro de que su hijo padezca o no dislexia, puede ser difícil saber cómo actuar. Pruebe a leer las señales de alerta que se muestran a continuación. Si su hijo muestra varias de ellas puede ser una buena idea realizarle una evaluación.

Señales de alerta en la Escuela Infantil

• Dificultad para reconocer las letras del alfabeto.
• La combinación de sonidos para formar palabras resulta difícil.
• El aprendizaje de palabras nuevas es difícil.
• Le cuesta aprender secuencias como los días de la semana o contar.
• Dificultad para rimar.
• Su vocabulario es más reducido que el de otros niños de su edad.
• Dificultades de pronunciación o intercambio de las primeras letras de las palabras.
• Le cuesta asociar los sonidos con las letras.

Señales de alerta en la Enseñanza Primaria

• Dificultades al deletrear y leer.
• Problemas al recordar números y hechos.
• Dificultad para aprender gramática.
• Depende en exceso de la memorización.
• Confusión respecto de la pronunciación de palabras nuevas.
• Dificultades con el enunciado de los problemas matemáticos.
• Tiene problemas para aprender nuevas habilidades.
• Tiene problemas para coger el lápiz.
• Confunde el orden de las letras.

Señales de alerta en la Enseñanza Secundaria

• Problemas al leer en voz alta.
• Dificultad para comprender frases hechas y chistes.
• Dificultad para resumir historias.
• Le cuesta aprender idiomas extranjeros.
• Le cuesta gestionar el tiempo.
• Edad lectora inferior a la real.

¿CÓMO PUEDE AYUDAR LA MECANOGRAFÍA A LAS PERSONAS CON DISLEXIA?

Para muchos jóvenes estudiantes que luchan con la dislexia, la mecanografía ha resultado útil de cara a la mejora de otras competencias como deletrear, la memoria, el vocabulario y la lectura. Por norma general, los estudiantes que han aprendido mecanografía a una edad temprana sacan mejores notas en los exámenes que implican el desarrollo de estas competencias, sin importar si tienen o no dislexia.

Un hecho significativo es que la mecanografía ofrece a los estudiantes con dislexia una forma alternativa de aprender. La memoria muscular que conlleva la mecanografía hace que deletrear sea poco más que una serie de patrones en un teclado, lo que disminuye la frecuencia de los errores al trasladar las palabras al papel o deletrear.

La escritura a mano es a menudo especialmente difícil para los estudiantes con dislexia. Los errores cometidos en este tipo de textos son mucho más difíciles de corregir, por lo que el papel suele acabar cubierto de marcas de la goma y palabras cruzadas, ya que los estudiantes no cuentan con la ayuda del corrector ortográfico. Tenga o no dislexia un estudiante, la mecanografía es generalmente una forma mucho más rápida, eficiente y sencilla de realizar sus deberes.

Además, se ha probado que la mecanografía mejora la escritura a mano en los estudiantes disléxicos, ya que mecanografiar permite al estudiante una mayor libertad para experimentar con estilos de escritura. Aprender mecanografía no sólo permitirá a su hijo reemplazar una competencia por otra, sino que mejorará las dos competencias a la vez.

Debido a procesos del pensamiento específicos de cerebros con dislexia, los que padecen este trastorno tienden a encontrar más fácil capturar sus pensamientos en una pantalla de ordenador o en un papel en primer lugar antes de reestructurar y formatear la información posteriormente.

Desde ayudar a los estudiantes con dislexia a comunicarse de forma eficiente con sus padres, profesores y compañeros, a ayudarles a competir más tarde en el mundo laboral, los beneficios asociados a enseñarle mecanografía a su hijo son realmente infinitos. Esta es una habilidad que su hijo no querrá perderse.